Querido Divorcio
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The article below was written by Miranda Rodriguez (pictured above). She gave permission for the article to be shared on Restored’s blog. It originally appeared on her blog, Miranda Kate.co. For the English version, go here.
Querido divorcio,
Gracias a ti, aprendí que nada en el mundo dura lo que debería.
Querido divorcio,
Difundes la mentira terrible que la ‘fecilidad’ llega cuando te vas , que esa es la única solución.
Los convenciste de que ‘los niños son resilientes;’ y que al final todo lo que queremos es que ‘sean felices’.
Querido divorcio,
Me enseñaste que no puedo confiar en nadie, ni siquiera en las personas que dicen ‘te amo’, ni siquiera en mi misma.
Querido divorcio,
Me mostraste que mi mundo puede desmoronarse en cualquier momento – así que no puedo ponerme comoda.
Querido divorcio,
Hiciste que las noches fueran una tortura lenta mientras intentaba controlar el dolor sola en la oscuridad.
Deja de llorar
Deja de lorrar
Deja de llorar.
Querido divorcio,
Me enseñaste que tengo que aislarme, mantener mi distancia, quedarme desapegada , y tener miedo en vez de amor.
Querido divorcio,
Me hiciste buscar desesperadamente algo de atención pero desconfiar en el cariño.
Me convenciste de aferrarme en vez de confiar, porque se van a ir.
Se irán.
Querido divorcio,
Causaste que la culpa me siguiera cada día de mi vida. Culpa que me envuelve, aun que no fue mi culpa.
No fue mi culpa
No fue mi culpa
No fue mi culpa.
Querido divorcio,
Hiciste que la cercanía se sintiera inalcanzable, el amor imposible
Querido divorcio,
Me hiciste sentir poco amada – por que no soy digna y nunca voy a ser suficientemente buena.
Me dijiste que hay algo mal conmigo – lo tiene que haber
Querido divorcio,
Me llenaste de furia sin manera de expresarla. Me dijiste que tenía que enterrar la rabia en un lugar muy profundo.
Estoy enojada
Estoy enojada
Querido divorcio,
Me dejaste con el corazón de una niña rota, un corazón demasiado débil para amar, demasiado herido para ser sostenido.
Duele.
Querido divorcio,
Me quitaste mi refugio, mi consuelo, mi seguridad. Te lo robaste.
Bastardo.
Querido divorcio,
Nunca sabrás cómo hacer una promesa a alguien y cumplirla.
Nunca envejecerás con la persona que prometiste ‘hasta que la muerte nos separe.’
Nunca vas a experimentar el amor incondicional de una persona día tras día.
Nunca sabrás lo que es regresar a una casa con las mismas personas, la misma persona, año tras año.
Querido divorcio,
Nunca sabrás lo que significan: las palabras ‘amor’ y ‘famila’ y ‘quedarse’.
Querido divorcio,
Vas a faltar a momentos innumerables. Abrazos, besos, lágrimas y avances, peleas y tristeza, el perdón y la reconciliación, primeros y últimos momentos. Nunca los recuperarás.
Los fantasmas de los recuerdos te perseguirán hasta tu muerte solitaria.
Lo que pudiera haber sido.
Nunca sabrás lo que pudiera haber sido, lo que había al otro lado de quedarse – el perdón, la gracia, el amor.
Te compadezco.
Querido divorcio,
Pensaste que me tenías. Creíste que compraría tus mentiras traicioneras. Pero no lo haré.
Has desviado a muchos otros, los atrajiste con tu llamada de sirena, pero a mi no.
Nunca seré tuyo – he visto demasiado.
El encanto de la ‘libertad’ es nada más que la soledad. La felicidad que prometes es vacía – un agujero negro de deseos egoístas.
Conozco el sufrimiento. Conozco las consecuencias. Conozco el dolor. Lo sé todo.
Nunca te elegiré – nunca en mi vida.
Tu eres oscuro, triste y solo.
Te compadezco.
Querido divorcio,
Gracias a ti, se que nunca seré tuya.
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